Reseña del libro "La Vida Es Tu Cancion ¡No Desafines!"
Sí; vivir para cantar firme y dulcemente. Muchas veces no es así. Claro que influyen y hasta determinan el medioambiente, la familia, la raza, la religión, la condición social. Sin embargo, Dios quiere que con la sonrisa en el rostro y el corazón, tomemos caminos y destinos hasta nuestras propias cumbres. El ser humano no calcula y a veces no entiende sus propios recursos y capacidades, aunque está dotado para alcanzar metas mayúsculas y forjar sublimes. Se piensa, por ejemplo, que el dinero, es el tesoro mayor. No. Otros logros de valor, virtud, coraje, decencia, estudio, superación, servicio público, amor al género humano, devoción a la amistad, el compareñismo, la sociedad como familia mayor, la consagración al bien común, son riquezas hermosas e infinitas. Toda la vida puede ser un prodigio si andamos y sentimos limpiamente. Este camino es el más fácil, aunque se piense lo contrario. Nada supera el placer de servir. Y estas no son consideraciones de un joven soñador con tendencias místicas, sino conclusiones de quien ha vivido mucho y no se ha cansado de sonreír y amar. Claro que el sendero no lo cubren sólo rosas. La incomprensión, la envidia, la ingratitud, asoman y agreden. El secreto es seguir; seguir siendo... en busca de Dios. LCA