Reseña del libro "Kagerou Daze"
KAGEROU DAZE empieza en la habitación de Shintarō Kisaragi, un hikikomori de 18 años que lleva encerrado en su habitación dos años con la única compañía de su ordenador y su conexión a Internet. Bueno, realmente esto no acaba de ser cierto. De hecho, desde hace un año Shintarō vive «preso» de una ciberchica llamada Ene, la cual apareció en su pantalla de ordenador cuando alguien le mandó un e-mail anónimo con un extraño archivo adjunto.
Y precisamente será Ene la que hará que la vida de Shintarō cambie: al ponerse a trastear el ordenador de Shintarō, hace que éste entre en pánico y acabe tirando su refresco por encima de su teclado, lo que lo deja inutilizado. ¡Y he aquí el problema! Resulta que es día 14 de agosto, de modo que si compra otro teclado online, al estar en pleno festival del Obon, no le llegará hasta mínimo el día 17. ¡¿Pero nos hemos vuelto locos, o qué!? ¡No se puede estar tantos días sin teclado!
Así pues, Shintarō decide salir por primera vez en dos años de su cuev… digo, habitación. Pero, ay, al llegar al centro comercial se encuentra envuelto en un robo con secuestro. Aunque, por suerte, allí entrará en contacto con el grupo de adolescentes con superpoderes visuales llamado «Mekakushi Dan», en el que, entre otros miembros, se encuentra su hermana Momo Kisaragi, una popular superestrella que tiene la extraña habilidad de hacer que todo el mundo se fije en ella allá por donde vaya.
Bien, pues en pleno embrollo los «Mekakushi Dan» consiguen sabotear el secuestro con sus poderes. Pero desde este mismo momento contarán con un nuevo miembro: Shintarō Kisaragi, ya que una vez revelado su secreto, no pueden dejarle marchar como si nada…
