Otro Se cansó de hablar de sí mismo y creó un alter ego al que inventar historias. Un otro de verdad que sufriera por cosas que hacen sufrir a los hombres y riera con una risa franca; que abrazara y besara honestamente, que tuviera un trabajo y una casa, quizás incluso una familia en el futuro. Pero un día ese otro también descubrió que quería detener los relojes, leer libros de espuma de mar y hablar con las palabras como con sus iguales. Alter Ego pensó que quería escribir versos propios e inventarse poemas… Y entonces decidió crear un hombre.