Después de publicar una inmensa cantidad de cuentos, Chéjov se decidió a escribir una novela, pero no una tradicional sino una de género policial, tal vez la primera en Rusia. La tituló Un drama de caza y fue publicada por entregas en un periódico. En forma de libro apareció en 1923. Para sus lectores fue, por varias razones, una sorpresa.