es bastante mañoso. o, al menos, eso es lo que parece creer míster parker. da igual; pronto iba a estar de camino a la india y dejaría atrás este cámping junto al lago. tan pronto como terminara la tarea que le había encargado míster parker.. el verano tocaba a su fin. los otros campistas ya se habían marchado, y con ellos desaparecieron el sol, el agua caliente en las duchas y hasta la cerveza buena del pub. males menores a los que apenas se presta atención entre tantas tareas por. hacer. de cobrar, hablarían más tarde.. y además, estaba empezando a hacerse un hueco en la sociedad local... tal vez el viaje podría esperar un poco más.. «en su segunda y brillante novela, regresamos al ámbito rural que mills ha hecho suyo. hay la sensación desconcertante de que todoy todos están conspirando contra nuestro héroe, de que la fatalidad o el terror se ciernen sobre él [...] la vida en el campo que nos muestra es hermosa, aterradora y deliciosamente banal. mills se regodea con las conversaciones y las situaciones cotidianas, que pasan a ser surrealistas e hilarantes. un poco en el estilo de los hermanos coen» (daily mirror)..