Vincenzo Arcadipane tiene cincuenta y cinco años, un matrimonio fallido a sus espaldas y un futuro que no promete mucho. Además, en los últimos tiempos se ha convencido de que ha perdido el instinto que le guiaba en las investigaciones. Pero cuando una mujer es golpeada en una estación de metro de Turín y al cabo de unas horas se localiza al culpable, el instinto el que sugiere que en ese caso hay algo que no cuadra. Con la ayuda de Corso Bramard, antiguo jefe y mentor, y de la sagaz agente Isa Mancini irán descubriendo las reglas de un juego loco y letal, un descenso al mundo subterráneo de Internet.