Para Inmanuel Kant la diferencia entre la mano izquierda y la mano derecha era la revelación misma del espacio como un marco de oposiciones insuperables. Las dos manos pueden unirse para aplaudir o rezar pero no sustituirse; están frente a frente, radicalmente reñidas, sin que ninguna operación lógica puede resolver esa c ontradicción espacial absoluta. No hay síntesis posible que pueda reconciliarlas; ning