Como papás el mayor anhelo es que nuestros hijos sean felices, se desarrollen bien y coman de manera saludable. De ahí que cuando no se alimentan como debieran, nos invade la preocupación, la angustia y la desesperación; nos preguntamos qué estamos haciendo mal. En este libro se explica por qué existen niños quisquillosos para comer y cómo influyen los padres en los malos hábitos alimenticios; además se sugieren técnicas y recursos para mejorar la calidad y consumo de alimentos, porciones adecuadas, así como recetas fáciles, sencillas y deliciosas a las cuales no podrán resistirse.