Un caracol de mar está desesperado porque ha perdido uno de los hermosos botones amarillos que adornan su traje, pero cuando en la playa una niña lo coge con su balde para jugar con él, descubre que existen preocupaciones mayores. El miedo a lo desconocido y la sorpresa que significa cambiar de ambiente puede transformarse en una aventura peligrosa. Así lo entiende este caracol cuando es devuelto sano y salvo a su hábitat en el borde costero. Forma parte de la colección infantil de relatos visuales Ochodrilos.