Esta obra sitúa, analiza y expone el exilio chileno en México, cursado en la Casa de Chile, espacio institucional donde se hicieron actividades, encuentros, publicaciones y discusiones. Se aborda el exilio de dirigentes y militantes de izquierda -la mayoría- y de centroizquierda, junto con sus familias, hacia diversos países, expandiendo así formas de resistencia y denuncia ante la dictadura pinochetista.