La vida es sueño revela una belleza y una armonía deliciosa. 3,3 19 versos componen esta obra, de los cuales 2,943 son octosílabos, habiendo un pequeño lugar para pareados con alternancia de heptasílabo y endecasílabo, y ocho octavas reales. Nos muestra la ilusión y lo aparente de la realidad misma, una realidad que se muestra como verdad y ésta como adecuación a lo que realmente existe, de lo cual no se puede afirmar si es o no es más que sueño. PEDRO CALDERÓN DE LA BARCA (1600-1681) es uno de los más destacados autores de nuestro siglo XVII, especialmente a partir de los años cuarenta cuando las muertes de Lope y Tirso le convierten en figura indiscutible, tal era la distancia que le separaba de sus competidores. Recogió el legado teatral de Lope de Vega al que depuró de algunas imperfecciones e imprimió su personal sello: mayor rigor técnico, preocupación moral o transcendencia. Su obra durante mucho tiempo tenida por representante de la España oficial, ortodoxa e intransigente, ha salido por fin del descrédito en que las acusaciones de oscurantismo la habían sumergido hasta convertirla en una de las piezas claves de los estudios hispánicos.