Gorostiza se ha destacado tanto en el campo de la narrativa como en el de la dramaturgia, recibiendo numerosos premios en el país y en el extranjero. Obras teatrales suyas como "El puente" (considerada fundacional de la nueva dramaturgia argentina), "El pan de la locura", "El acompañamiento" y otras, han sido traducidas y representadas en diversos países y admiten ya el calificativo de clásicas. Como narrador, el reconocido cofundador de Teatro Abierto ha publicado varias novelas, entre ellas "Los cuartos oscuros" (1974), "Cuerpos presentes" (1981) y "Vuelan las palomas" (Premio Planeta, 1999), y sus memorias, "El merodeador enmascarado" (2004). Fue distinguido por el Gobierno de Francia con la orden de "Commandeur de l'ordre des Arts et Lettres y por el Gobierno de Venezuela con la "Orden al Mérito". Esta novela cuenta la relación de una fotógrafa argentina con un fotógrafo internacional en un contexto hostil cruzado por guerras y conflictos.