Zarabella vive en una preciosa casa de hadas que ha decorado ella misma. Es una excelente cocinera y lo que más le gusta es preparar magdalenas. Tras un largo día en la cocina, Zarabella se dedica un rato al jardín. Le encanta montar en bici por el campo y salir a disfrutar del aire libre. Aunque al final del día, no hay nada que le guste más que volver a su maravillosa y mágica casa.