En la búsqueda por comprender el campo de emergencia de la etnoeducación en Colombia, pronto se despierta un interés mayor, fundado en el papel que debe cumplir la educación en una sociedad cuyas bases han sido cimentadas en la exclusión, la marginalización, la segregación, la invisibilidad, la negación, la dominación y la “subalternización”, entre otros aspectos. En esa exploración, los conceptos diferencia, cultura, interculturalidad y, por supuesto, etnoeducación, generan grandes interrogantes sobre los usos en la explicación de los problemas sociales. Es justo, mediante la indagación de éstos, que se empiece a entender la educación intercultural como una propuesta política que incidirá en la construcción de región, asumiéndola bajo una mirada crítica y emancipadora. El primer libro del profesor NÉSTOR CORTEZ OCHOA insinúa un rastreo hacia este camino.