¿Es sincera una mujer cuando afirma haber encontrado al hombre de su vida? ¿Puede un hombre asegurar que sería incapaz de amar a otra? ¿Son veraces los sentimientos que buscan su expresión a través de la mentira? ¿Cuál es la relación entre el discurso amoroso y el amor en sí? ¿Es posible la autenticidad en una sociedad que vive para cuidar las apariencias? Con la ironía y el humor característicos de su estilo, Oscar Wilde invita al lector a encontrar el centro de este laberinto de engaños y verdades, donde no faltan tías interesadas, ni institutrices solteronas, ni mayordomos que sirven puntualmente el té de las cinco.