«Identidad» es un concepto elusivo pero central y omnipresente en todo tipo de discursos sobre la existencia social e individual. Se habla de identidad nacional, cultural, de grupo, personal, colectiva, de la identidad de un país, de una ciudad, de Europa, de la identidad corporativa... Incluso, de veces, se hace el elogio de un tipo de no identidad, que no deja de ser otra forma de identidad. Sin embargo, pocas veces se aclara el contenido preciso del término. En este libro en forma de diálogo con el periodista italiano Benedetto Vecchi (director de Il Manifesto), el sociólogo Zygmunt Bauman explora el contenido y las transformaciones de esta noción al mundo moderno, en un contexto de grandes cambios –relacionados con el que dice su modernidad líquida– en que las identidades se vuelven cada vez más precarias y provisionales, sin dejar, sin embargo, de tener una enorme significación, como fuente de lazos necesarios y también como espacio de conflicto. La identidad, a pesar de su carácter vago y ambivalente, se convierte en un concepto clave para entender la evolución de la vida social y personal en la época contemporánea, de creciente inseguridad y disgregación de vínculos de sentido.