George Washington Caucamán, detective de origen mapuche y gatillo ligero, es destinado a la capital, y empieza a investigar un caso de llamadas amenazadoras a una línea caliente de sexo. Dos datos hacen especialmente inquietante el caso: la chica de la Hot Line es una exiliada recién regresada al país y las llamadas tiene q ue ver con la dictadura pinochetista.