¿Puede una madre desenmascarar a las mafias que asesinaron a su hija? Cuando el 14 de febrero de 2001 Alejandra García Andrade desapareció, con sólo diecisiete años, al salir del trabajo, su madre, Norma, no imaginaba el alcance de la pesadilla que acababa de comenzar para ella y para el resto de su familia. En Ciudad Ju árez, la desaparición de una mujer no parece importar más que a los familiares y a los