la fusión de los cinco elementos constituye el primer nivel de la alquimia interior taoista, disciplina cuya finalidad es controlar las energías de nuestro universo interior y establecer una estrecha conexión entre ellas y las existentes en el mundo externo. se trata de un primer paso controlar la generación y el flujo de nuestras energías emocionales, mentales y físicas, en el que aprenderemos a localizar las energías negativas ocultas en nuestro cuerpo. mediante la teoría de los cinco elementos aprenderemos a establecer una conexión entre los cinco órganos de los sentidos externos -ojos, lengua, boca, nariz y oídos- y las cinco emociones negativas -ira, odio, preocupación, tristeza y miedo-. gracias a esta identificación, las emociones negativas podrán ser controladas y transformadas en energía utilizable, positiva y creativa. aprenderemos también a cristalizar y condensar la energía positiva en una misteriosa perla, quintaesencia de nuestra vitalidad o chi, y a proyectarla fuera de nuestro cuerpo físico para formar a partir de ella el cuerpo de energía o cuerpo del alma. posteriormente aprenderemos a transferir a ese cuerpo de energía una parte de nuestra conciencia, y aprenderemos también a controlarlo y a reforzarlo con las energías de la tierra, de los planetas y de las estrellas.