El tema de la oralidad y su regulación en el proceso judicial ha sido y es todavia una cuestión siempre presente al momento de diseñar un determinado procedimiento. Se puede decir que constituye uno de los grandes temas de estudio, reflexión y porqué no decirlo de preocupación de académicos, legisladores y jueces. Cada cierto tiempo algunos Estados, a través de sus ordenamientos jurídicos, acuden a la consideración de la técnica de la oralidad como un medio con el cual se busca mejorar el proceso.