"A no dudarlo, la instalación del problema sobre el cual tan ampulosas declaraciones han esgrimido la fácticos del amplio espectro político, no surge de su propia diagnosis, es un malestar con el orden existente instalado a punta de marchas, huelgas, paros, tomas y demandas de las mas diversas y amplias expectativas: Estudiantiles por la calidad, la gratuidad y la estabilidad de la educación. Por la defensa del territorio y la comunidad frente a las grandes empresas, contra la colusión de los carteles económicos y las “malas prácticas empresariales”; pero también contra el abuso y la represión de las fuerzas de orden publico, contra la falta de probidad de algunos funcionarios de gobierno y por la espuria relación entre los políticos y empresarios. A no dudarlo, la demanda por una Asamblea Constituyente y por una nueva Constitución, es una demanda que surge desde la acción de los movimientos sociales y por el malestar de una ciudadanía que esta reactivándose."