El comienzo de un emprendimiento empresarial familiar muchas veces no suele ser fácil. Tiempos de crisis; incertidumbres y de dinero escaso pueden ser los motivos principales de estas dificultades. En otro sentido; cuando nos hacen referencia a empresas familiares; enseguida sospechamos la existencia de conflictos organizacionales; desacuerdos e incompatibilidades familiares y otros enredos que concluirán poniéndole fin a aquel sueño por el que tanto luchó el fundador.