En El pasante de notario Murasaki Shikibu se encuentran varios tonos de una sinfonía literaria sublime. Diversos personajes que son uno solo realizan actos de aparición y desaparición para constituir una pieza clave de la nueva literatura de habla hispana. Con una escritura refrescante, Mario Bellatin doblega la linealidad del relato y nos conduce por ríos subterráneos, cuevas perdidas en la India, parajes agrestes del Japón medieval y otras locaciones que bien pudieran ser Ciudad de México o Santiago de Chile. Bellatin confirma, en esta última obra, que la suya es una de las más prodigiosas mentes imaginativas de nuestro tiempo.