Según el análisis trasnacional, el ganador es la persona auténtica, creíble digna de confianza, sensible, íntegra. Cultiva el gusto por la vida y la pasión por todo lo que da sentido a la existencia, sabe esperar el momento justo y transita un camino que lo abre siempre más a su propia intimidad y a la de los demás. Partiendo de las categorías fundantes de la hipótesis transnacional, la autora define en este trabajo el verdadero rostro de la sexualidad, trazando un itinerario que conduce al lector a descubrir y promover dentro de sí su propia identidad sexual para, como consecuencia, vivir un comportamiento sexual auténtico. Vale la pena vivir una sexualidad positiva, ganadora, que el sapo se transforma en príncipe y se libere de un hechizo que aprisiona su potencial de coherencia, de integridad, de fecundidad y de belleza.