En los últimos años, Manuel ha ido reflejando en un Cuaderno violeta, regalo de son âme soeur, son âme jumelle spirituelle, Mercedes, las vicisitudes acaecidas en su entorno familiar: desde el desempleo y el crujido terrible a sus economías, que obligó a su hijo y nuera francesa a buscar refugio en la rama de Toulouse y a su hija en una multinacional farmacéutica de Canadá, a pasar los últimos años viendo crecer a los nietos, viviendo la inestabilidad emocional de Nadia, recordando con nostalgia la unión que siempre tuvo con su nuera canadiense, saboreando la amistad profunda que desde jóvenes han tenido él y Teresa con Mercedes y más recientemente con sus consuegros tolosanos, pero también con algún episodio terrible intercalado en sus vidas, en una historia que transcurre en el Madrid de nuestros días, con unos personajes que pertenecen a distintas épocas y culturas y a diferentes maneras de pensar.