En el Himalaya, la cordillera más alta del mundo, y tras las huellas de Maurice Herzog, una expedición de alpinistas catalanes alcanzó en 1974 una cumbre mítica jamás hollada hasta entonces por el ser humano, el Annapurna Este, que se alza a 8.026 m. Constituyó el primer ocho mil español. Los nueve experimentados montañeros, con el material de escalada propio de aquellos años, emprendieron la ascensión sin ayuda de sherpas de altura, siguiendo la ruta más segura y fiable.